Vacío. Así siento que tengo el corazón. Aletargado. Y sé que la medicación tiene mucho que ver. Que de esta forma mis bajones son menos bajones. Pero mis alegrías son menos alegres.
Y están pasando cosas buenas a mi alrededor. Y muy bonitas. Algunas únicas en la vida.
Pero no puedo sentirlas como antes. No me llegan al corazón.
Es como si lo tuviera detrás de un muro insalvable.
Vacío de cosas malas.
Porque aquellas ideas que no paraban en mi cabeza. Que no me dejaban vivir, dormir, respirar ni comer… son cada vez menos. Poco a poco la medicación las va callando. Se vuelven menos molestas. Las puedo mandar lejos de un manotazo.
Soy capaz de hacer una vida más normal. Concentrarme en algo que no sean mis propios pensamientos.
Y doy gracias por ello. Porque ahora soy más funcional. Puedo hacer cosas que las «personas normales» hacen sin ningún esfuerzo poniendo cada vez menos energía. Lo que ayer era una montaña hoy es una colina. Y puede que mañana sea solo un pequeño desnivel.
Vacío de cosas buenas.
Porque aquello que impide a las ideas malas meterme en la espiral negativa también filtra las cosas buenas. Es un filtro que no reconoce aquello que pasa por el. Todo lo hace más pequeño para que quepa por los orificios y me llegue. Y así en vez de una gran alegría siento un montón de cosas pequeñas que me conmueven
Pero no es como solía ser.
No siento la risa vibrar en mi pecho cuando me río. Me cuesta que las comisuras de mis labios quieran ir de oreja a oreja.
Y yo me siento culpable de este vacío.
Yo quiero sentir. Quiero alegrarme de las cosas buenas que le pasa a la gente bonita a mi alrededor, llorar de alegría, vibrar en la sintonía de los demás. Celebrar la vida y el amor. Celebrar que estamos aquí y ahora.
Pero no me nace.
Me fuerzo a ello porque lo quiero tanto que casi puedo tocarlo. Pero no llego. Me estiro y me estiro para intentar alcanzarlo… y acabo llorando. Pero no de alegría, si no de culpabilidad.
Porque me gustaría ser la de antes, esa persona que sonreía y alegraba a los demás. Que tenía detalles. Que sabía vibrar en las emociones de otros.
Y ahora solo soy capaz de reflejar lo malo, la tristeza, el cansancio…
Tengo unas cadenas que no me atan a nada, pero no puedo avanzar al ritmo de antes. No sé si son buenas porque ya no hay una roca que me impida ir hacia adelante… o si son malas porque voy con miedo a caerme y mis pasos son lentos y torpes.
Clara dice
Te voy a dar un consejo que no me has pedido.
NO TE FUERCES. Llegará. Volverás a ser tú completamente.
Pero no puedes ni debes forzarlo porque tu momento ahora es este y tienes que pasar por ello.
Es una mierda, sólo puedo imaginarlo. Pero culparte no te va a hacer avanzar.
Sigue pasito a pasito, llegarás a tu destino. Y estamos contigo mientras tanto.
Si las alegrías son pequeñas de momento, disfrutalas igualmente. Si no te nace sonreír de oreja a oreja sonríe pequeñito, que ya irá creciendo.
Te quiero tanto que me gustaría poder hacer algo más por ti. Pero sólo puedo acompañarte en el camino y bailar juntas cuando llegues a la mete. Cuando sea, sin prisa, sin presión. Pasos pequeños en la dirección correcta.
Gotita a gotita también se llena un corazón de felicidad :*
Lucy Chibimundo dice
Eres un solete 😘
Llegaré… no se cuando pero volveré a ser la de antes, o quizas otra mas sabia 😅
Clara dice
No necesitamos saber cuando.
Necesitamos apoyarte ahora y disfrutar cada avance por pequeño que sea 😉
Mamá Neurótica dice
Reina no sabía que estabas pasando por un proceso empcional complicado. Solo te digo que todo se irá regulando poco a poco. Verbaliza. Escribe. Habla. No te escondas. Pero no dejes que esto sea el centro de tu vida.
Te deseo mucha fuerza, alimentate de las cosas buenas que pasan a tu alrededor.
Un abrazo
Lucy Chibimundo dice
Soy un proceso emocional complicado en mi misma jajaja… muchas gracias :*
Laura dice
Llegarás estoy convencida, pero mientras, apóyate en las que estamos a tu lado cuando lo necesites, igual que antes nos has sostenido tú. Ahora nos toca a nosotras ;p
Lucy Chibimundo dice
Cuesta tanto buscar apoyo, aún cuando sabes que lo tienes, menos mal que me lo recuerdas :*
Nueve meses y un día después dice
No te fuerces. Todo llega. Estás cogiendo impulso. Te diría que tengas paciencia, pero eso jode tanto (aunque es clave). Mucho ánimo. Estás en el camino.
Lucy Chibimundo dice
La paciencia no es mi mayor virtud, y si, jode ir lento, pero bueno, es el camino que hay. Gracias <3
Maihum dice
La depresión es difícil, y parece que nunca se va a salir de allí, pero ya tienes ayuda y seguro que lo lograrás, parecerá eterno el camino, pero llegarás. Escribir ayuda, y darte cuenta que tienes gente que te acompaña más
Besos
Lucy Chibimundo dice
Tengo mucha suerte de contar con ayuda. Muchas gracias 🙂