Al igual que hice el primer, el segundo, el tercer y el cuarto año, vuelvo con una carta a Loki contándole cómo es todo con cinco años. No me puedo creer que esté en este punto ya.
Loki, mi amor, si el año pasado decía que habías dejado de ser un bebé ahora estoy convencida de que eres un niño. Cada vez tienes menos de ese bebé, aunque todavía al dormir hay veces que mueves la boca como si estuvieras tomando teta y me llena de ternura. En este último año has crecido más por dentro que por fuera.
Hemos (sobre)vivido a un curso pandémico mucho mejor de lo que esperaba en Septiembre y en parte ha sido por lo bien que lo has hecho. Tú, tus compañeros y el centro escolar. Que al principio no me convencía mucho pero del que ahora estoy muy contenta.
Este último año ha sido muy familiar porque aún hemos mantenido las distancias, pero tengo la esperanza de que con la vacunación cambie pronto.
Loki de la cabeza a los pies.
No sé si haremos la revisión de los cinco años porque estás sano como una manzana y no toca vacuna. Creo que pisar el centro de salud sin un motivo no tiene sentido. Lo que sí hemos hecho ha sido la revisión del dentista y pronto tocará ir al oftalmólogo, que hay muchas personas con gafas en la familia y aunque parece que no tienes problemas de vista es mejor prevenir.
La báscula que tanta gracia te hade dice que estás ente los 19 y los 20 kilos. Con eso de reconocer los números te ha dado por pesarte solo para ver qué sale. Y a mi me parece estupendo. Todavía te cojo en brazos para darte abrazos muy fuertes o papá te sube a hombros de vez en cuando, pero lejos quedan los días en que pedías que te lleváramos en brazos. Si te cansas pides volver a casa.
Mides 108 cm de alto según el medidor de la jirafa que está detrás de la puerta de tu habitación. Ya no nos dejas poner nada, te encargas tú de escribir la fecha y tu nombre… y cada vez lo haces mejor.
Nos hemos plantado en verano sin tener sandalias ni chanclas porque las del año pasado no te entran. Has pasado de un 28 a prácticamente un 30. Sigues siendo un poco tiquis y en cuanto empieza a quedar algo justo dices que te están pequeños. Esta año lo que no hay manera de quitarte son las botas de lluvia que desaparecerán y ya no volverán, porque te están pequeñas. Habrá que coger unas nuevas el próximo otoño.
¿Cómo te comunicas con cinco años?
Igual que el año pasado a veces me gustaría que tuviera un botón de silencio para dejar de hablar aunque sea durante 5 minutos. No paras de hablar, hablas comiendo a la vez que te enteras de lo que están diciendo en las noticias (que no te gustan) y pillas la conversación a medias que tenemos tu padre y yo. No sé como eres capaz de hacer tantas cosas a la vez.
Wanchun y Minch siguen con nosotros. Bastante menos presentes que el año pasado porque tienes a los amigos del cole para tus aventuras. Aún así no han desaparecido y me parecen divertidas las historias que te montas con ellos. Si algo no te falta es imaginación.
Te da por hablar de forma ininteligible y dices que es inglés pero de ese idioma tiene poco. Inventas muchas palabras, términos, nombres… el lenguaje es algo completamente vivo para ti y si no te gustan las normas te las saltas.
Este año en el cole has aprendido todas las letras y las conoces perfectamente. Incluso lees algunas palabras si te da por ahí. Cuando te pedimos que lo hagas a veces te ofuscas o pasas de nosotros, tiene que ser cuando te da por ahí. Pero me resulta muy fascinante verte decir cosas que hay en letreros. Entiendo que son cosas que pasan según creces pero se me hace rarísimo.
La música siempre ha sido muy importante para ti. Te sabes muchas canciones que habéis aprendido en el cole y las cantas sin parar (estoy de la canción de los planetas hasta el moño). Y me encanta poner canciones que escuchamos en la radio o de mis listas de Spotify y comprobar que te las sabes… aunque chapurrees la letra en otros idiomas con lo que te sale del pie.
Cada vez veo más claro que la recomendación que me hicieron en la guarde de llevarte a clases de algo relacionado con la música tiene sentido. A ver si el curso que viene hay alguna extraescolar relacionada o encontramos algo por el barrio que pueda gustarte.
¿A qué juegas Loki?
Has adquirido una habilidad fascinante para jugar con la Nintendo Switch. Al principio necesitabas a Natsu para todo pero poco a poco te apañas mejor haciendo las cosas solo (sin ayuda). Hemos dejado atrás el Lego Harry Potter Collection (cooperativo) y prestamos el Super Mario Odyssey así que hemos estado probando juegos nuevos.
Hemos jugado al Pokemon o al Katamari. Ahora nos lo pasamos muy bien bailando con el Just Dance y haciendo el tonto con el Mario Party. Y para mi cumpleaños me pediré el Ring Fit Adventure para que sigamos jugando juntos con la consola a cosas de moverse.
Durante la cuarentena y el año pasado tiramos bastante de Nintendo Switch por todas las horas que pasamos en casa. Este año con el cole y las rutinas ha sido mucho más fácil gestionar los horarios de juego. Vamos controlando los tiempos de uso porque además de la Switch también está el ver la tele (sobre todo Netflix) y uso de pantallas es complejo. Lo hacemos lo mejor que podemos y a veces puede que abusemos si necesitamos entretenerte por teletrabajo o buscar un respiro, pero hemos buscado juegos en los que moverse sea importante para que jugar no signifique sentarse en el sofá.
Los juegos de mesa de HABA fueron una gran compra y seguimos disfrutando de Mi primer frutal como el primer día aunque vas inventándote reglas para hacerlo más complicado. De ve en cuando hemos jugado con los abuelos a través de videollamada y todo. Con Animal sobre animal te frustras bastante cuando se caen los animales pero se te da muchísimo mejor que hace un año.
Ahora hemos descubierto el UNO (de Mario) y te encanta echar partidas de cartas. Como va con dibujos, números y colores es asequible para más pequeños. A veces te frustras cuando hacemos cambio de sentido o te saltamos porque te gusta mucho más ganar que perder pero estamos trabajando en ello.
La bicicleta con pedales está bastante dominada y el siguiente paso será quitarle los ruedines, pero no sé cuando lo haremos, tampoco hay prisa ninguna. Has comentado varias veces que querías unos patines y a mi me encanta patinar pero cuando los hemos probado te ha dado miedo así que supongo que los dejaremos para más adelante.
¿Qué sigue igual y que ha cambiado con cinco años?
Ya hace dos años que la teti está más que acabada pero todavía sigues buscando con las manos acariciar la zona para dormirte o mientras estás dormido. Te da igual de quien sea el pecho, lo que quieres es la cercanía supongo.
Este ha sido el segundo año en el cole de mayores y el primer curso completo porque el anterior se quedó a medias por el COVID. Al principio tenía mucho miedo (yo) de que pillaras el virus, pero ha ido todo mucho mejor de lo esperado. Solo puedo dar gracias a ti, a tus amigos de clase, al profesorado y todo el personal del centro que no han perdido la sonrisa bajo la mascarilla aunque solo se la viéramos reflejada en los ojos.
La profe ha sido diferente del año anterior pero es una maravilla y sigues teniendo a alguien que te conoce y te cuida. Seguís siendo poquitos y eso siempre es una ventaja. El próximo será tu último curso de infantil y no me puedo creer que ya estemos llegando al final de esta etapa. Todo va muy rápido.
Aunque eres muy autónomo para la mayoría de las cosas sigues acabando en nuestra cama muchas noches. Tienes tu cama nueva en la que se duerme mucho mejor que en la antigua (y lo digo por experiencia) pero la grande siempre será la que más mola. Yo disfruto de dormir contigo pero la verdad es que cada vez hay menos espacio con 2 adultos, 1 peque y 2 gatazos.
Veremos si dentro de un año hemos conseguido que duermas en tu cama… la mayor parte del tiempo.
No sé donde estaremos dentro de un año, espero que sigamos juntos, felices y sanos.
Te quiero Loki.
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