Tras 31 días de ingreso así me siento: de vuelta a la vida. Como si de alguna manera tras el último intento de suicidio algo hubiera hecho click dentro de mi para darme cuenta de que no, no quiero morir. Quiero vivir. Quiero alcanzar mi arcoiris aunque tenga que perseguirlo lo que me resta de vida.
Mi tercer ingreso.
Si me seguís habitualmente sabréis que tuve un primer ingreso el año pasado, he tenido un ingreso por lo público este enero y a los cinco días de salir una recaída que me llevó de nuevo a ingresar.
Esta vez no tuvimos tiempo de preparar a Loki para pasar un tiempo indefinido sin mí. Fue todo muy rápido y complejo.
Como ya os comenté en la comparación de el ingreso público vs privado las condiciones para mi eran demasiado restrictivas. Tenía mucha ansiedad y eso se tradujo en diarrea constante y vómitos. Como no podía más pedí el alta voluntaria, a pesar de no haber habido mejoría dentro de mi. No podía más.
Pasé un par de días con mis padres y luego me vine a casa. El peque se puso malo, una gastroenteritis, y pedí ayuda a mi madre para cuidarlo. Normalmente no pido ayuda para estas cosas pero me sentía desbordada. Y era mi mente, haciendo de las suyas. En una escapada de mi madre para ir a comprar algo, aproveché para autolesionarme. Cuando quise hacer de esa lesión un intento de suicidio sonó la puerta. Mi madre estaba de vuelta. Me pilló a medio camino y paré en medio del intento.
Ese mismo día ingresé por lo privado.
En la clínica privada.
He pasado poco más de un mes dentro de la clínica. Esta vez con lo aprendido del anterior ingreso me apunté a las actividades en el momento del ingreso. Para tener cosas que hacer y luchar por mi recuperación con todas las armas (psicológicas) disponibles.
Como acabas de leer 3 párrafos más arriba… sí, intenté suicidarme. No es la primera vez, aunque espero que sea la última. Mucha gente me decía que no podía hacerlo «por mi hijo». Y yo me sentía culpable porque lo quería hacer precisamente por él. Para que estuviera bien cuidado. Porque en esos momentos pensaba que cualquiera lo cuidaría mejor que yo. Me sentía inútil como madre.
No te digo esto para recibir unas palmaditas en la espalda y que me digas que soy una buena madre. Lo digo para todas aquellas madres que piensen como yo en algún momento de sus vidas. Hacer cosas «por otra persona» no funciona. Si quieres recuperarte de verdad debes hacerlo por ti. Hacerlo de otra manera significa un sacrificio de nuestra felicidad en pos de la de los demás. Y entonces estarás en el mismo punto. Pero silenciada porque es tu «deber» callarte y tirar para adelante.
Nunca te calles. No sigas adelante sin más. Si tu salud mental está en juego lucha por ella, por ti, por tu vida, tu alegría. La de los demás llegará cuando tú estés bien. Porque una vez nos reencontremos con nuestra salud mental todo se vuelve más fácil.
De vuelta a la vida
No ha sido fácil este ingreso, he pasado por mis altos y mis bajos. Mis pasitos hacia delante y hacia atrás. Destruyendo algunas cosas que creía, desenterrando secretos que habitaban en mi interior desde hace mucho tiempo. Tratando de avanzar en contra de la corriente de mi mente enferma.
Esta vez he contado con la ayuda de una terapeuta durante el ingreso y me ha hecho mucho bien. Es una persona encantadora y no salgo de sus sesiones llorando destruída, sino empoderada con nuevas herramientas.
Y ahora estoy aquí en casa, tratando de retomar mi vida en el punto donde la dejé, que ha sido mucho tiempo, desde mi perspectiva. Loki ha cambiado muchísimo en este tiempo que he estado fuera. Solo lo vi un par de veces durante el ingreso porque me causaba mucha ansiedad la despedida.
Así que aquí estoy. De vuelta. De nuevo. Algo cambiada pero en esencia la misma.
Espero poder seguir adelante y dejar de una vez por todas esta depresión atrás que ya lleva demasiado tiempo acompañándome.
Gracias a tod@s l@s que habéis estado ahí durante mi ingreso.
Clara dice
Bienvenida de vuelta. Te seguiremos acompañando :*
Lucy Chibimundo dice
Gracias bonita, no sabes lo bien que me hace sentir el saber que estás ahí.
Clara dice
SIEMPRE 😉
DiscaHogar dice
Aquí estaremos contigo, si necesita gritar, llorar,reír, o simplemente saber que hay alguien al otro lado de tu blog, aquí estamos. Un abrazo.
Lucy Chibimundo dice
¡Millones de gracias!
Dragonfly dice
Bienvenida. Un abrazo enorme.
Lucy Chibimundo dice
Muchas gracias 😀
MamiReloaded dice
Eres muy valiente por compartir tu historia!
Lucy Chibimundo dice
Muchas gracias :*
MARTA dice
Bienvienida Lucy. Estoy convencida que conseguirás superarlo. Aunque no lo creas, estás demostrando ser muy fuerte y también valiente como te han dicho
Lucy Chibimundo dice
No me siento con fuerza ni valentía pero de tanto decirmelo voy a tener que empezar a creerlo. Muchas gracias 🙂
Una Chica del montón dice
¡Pues arriba ese animo ahora mismo! aprende a disfrutar de las pequeños placeres de la vida que en un pis pas estamos y luego ya no mas,te vendría bien pasarte por mi blog y leer la última entrada que acabo de subir.seguro que alguna de esas frases te ayuda a alegrar tu día y darte ese pequeño empujón que te hace falta 🙂
Lucy Chibimundo dice
Te agradezco muchísimo la buena intención que has puesto en tu comentario, pero esto no es cuestión de pensar en positivo o leer una frase motivadora y listo. Tanto la depresión como el trastorno límite de personalidad son enfermedades mentales con un diagnóstico en el que no te dicen cuando se puede curar. En algunos casos pueden ser de tipo crónico y el TLP es un diagnóstico que me acompañará toda la vida. El TLP tiene un mal pronóstico, incluso con medicación y terapia.
Muchas personas piensan que con pensar en positivo se evita la depresión y aunque es verdad que las personas positivas tienen menos posibilidades de padecerlas por su forma de afrontamiento no están exentas de que esto les pueda ocurrir.
Las enfermedades mentales son complicadas de entender e incluso de ponerse en los zapatos de estas personas (como yo). Para mi es difícil entender en qué estoy pensando cuando tomo ciertas decisiones o tengo ciertos comportamientos, así que entiendo que para otros puede significar un mundo.
Hijos Manual dice
Nunca es fácil afrontar ciertas situaciones, pero soltarlo al final es lo que necesitamos. Mucho ánimo.
Lucy Chibimundo dice
Soltar ayuda mucho, la verdad, las sesiones con la psicoterapeuta son una bomba de energía para seguir y una válvula de escape para dejar lo malo atrás.
Esperanza Benayas Caño dice
Hola cariño, no me conoces, es la primera vez que paso por aquí, y desde ahora te seguiré, me he tenido que leer tu post dos veces, no asimilaba lo que leía, te explico por que: mi pareja se suicidó hace un tiempo, desde entonces estoy luchando por seguir adelante, si crees que mi experiencia pudiera ayudarte estoy dispuesta a contestar todas las preguntas que necesites hacerme, he pasado por varias asociaciones de ayuda a los posibles suicidas, quiero convertir mi dolor en ayuda a quien lo necesite, pero las asociaciones y yo no nos llevamos bien, en fin, desde el lado de los que nos quedamos aquí estoy para tenderte una mano y que tu familia, tus amigos, tu hijo, y tus lectoras no sufran por tu pérdida como lo hacemos muchos de los que hemos perdido a nuestros seres queridos.
Si necesitas charlar sin miedos 6******5,y si quieres escribirme ,por lo demás apóyate en nosotros no estás sola aunque lo parezca o lo creas. Un enorme abrazo. No te rindas, sigue luchando.
Lucy Chibimundo dice
Lo siento mucho por tu pérdida sobre todo en esas condiciones. Las personas del otro lado no pensamos con la razón cuando hacemos estas cosas, si no que nos embargan las emociones y los pensamientos negativos o las creencias que no nos hacen bien.
Muchas gracias por dejarme tu contacto, eres un amor.
Saludos!