La familia es lo más importante. Es una frase que seguro has oído una y mil veces. Y por supuesto que tiene mucha importancia, la familia es nuestro núcleo y nuestro origen.
Mil y un tipos de familia
Si cada persona somos un mundo cada familia también lo es. De puertas para dentro en cada casa ocurren cosas diferentes, cada una con sus normas, sus reglas y sus formas de hacer. Y a la vez, para cada una de las personas que componen esa familia todo es de una forma distinta.
La vida es única, no solo por que cada uno de nosotros somos un milagro con patas si no porque somos capaces de contar una historia diferente con cada perspectiva.
Por eso la familia es tan importante, porque forma una gran parte de nuestra historia.
La familia de origen.
Cada uno llegamos a este mundo con una mano de cartas. Puede que ni siquiera todos juguemos con el mismo tipo de baraja. Es como una loca partida de dixit en la que las cartas puede significar algo diferente para quien las mira.
Quizás mires la mano con la que comienzas la partida de la vida y piensas que es muy mala. No elegimos a nuestra familia de origen, simplemente llegamos allí pareciendo que es un inicio desde cero cuando precisamente ellos ya vienen con su historia de casa.
Aprecia la familia que te toca.
La mano de inicio de juego es la que hay. No la podemos cambiar, simplemente podemos aprender a jugar con las cartas que nos han tocado. Quizás con el tiempo nos guste, aprendemos a querer ese juego, a valorar las cartas que nos han tocado.
Pero no tenemos por qué.
Quizás es un juego de mierda y unas cartas de mierda.
Por suerte, según crecemos podemos elegir. Podemos conocer otros juegos, otra forma de jugar con las mismas cartas, cambiar de baraja tantas veces como deseemos.
Pero algunas de la mano inicial se quedan siempre con nosotros.
Es posible que algunas de esas cartas estén rotas, de tanto usarlas. De devolverlas al mazo para que no vuelvan nunca más para solo volver a verlas aparecer en nuestras manos una y otra vez. Es lo que hay. La familia y la historia de origen que tenemos es fuerte. Nos enseña cosas cuando somos muy pequeños y se quedan grabadas.
Aprecia más la familia que eliges.
Aquellos que forman parte de tu vida ahora son los más importantes en cada momento. Es difícil dejar marchar a algunas personas, con otras se hace más fácil. A veces lo complicado es aprender a valorar lo que te aporta cada una.
Cada persona que pasa por tu vida te aporta algo, pero nadie es tan fundamental como para marcar tu historia para siempre.
Tenemos derecho a elegir, a tomar decisiones y a deshacernos de lo que nos hace daño.
Y si lo que hace daño es la familia de origen, bienvenida sea la puerta de salida.
La familia es importante, por supuesto. No lo voy a negar. Pero no es lo más importante del mundo. No nos marca de por vida. Podemos elegir que hacer con esa mano de inicio. Y quizás descartarnos duele, pero es lo más sensato.
Desde luego que si, aunque cuesta mucho desprenderse de la esperanza de que todo puede ser diferente mirando a las familias de los demás… Tienes mucha mano para contar metáforas 👌
Gracias bonita, a mi me da la sensación de que se me va la pinza un poco con las metáforas jajaja…
Yo soy otra de las que miran las familias de los demás… pero éso me pone mucho más triste, a pesar de que la familia no la elegí, me tocó… bueno, siempre hay esperanza de elegir a ésa famila… casi mejor dejo de escribir que tu ya lo has puesto muy bien y yo me estoy liando.
La familia que formamos nosotros es la de origen de otra persona y ahí podemos cambiar el juego, las cartas y la baraja por completo… con mucho esfuerzo, pero podemos :*
Qué tema tan complejo…
Pero estoy de acuerdo contigo. De partida te tocan unas cartas que pueden ser buenísimas o no.
Entonces creces y formas tu propia familia (de sangre o no) que le da vida a tu mundo 🙂
Al final las personas que más te influyen cuando vas creciendo son las que están presentes, de una forma u otra en tu vida y esas pueden compartir sangre o no.
Aprender a jugar con las cartas que nos han tocado… Es un ejercicio en ocasiones dificil, pero cada vez lo veo más necesario en mi vida.
Me ha encantado el post!!!
Muy difícil de hacer y de aceptar, tenemos muy interiorizado que la baraja que nos ha tocado DEBE ser la mejor y hay que apreciarla si o si… pero no, tienen que ganárselo, como todos.